2 tazas de harina sin preparar*
1 1/2 cucharaditas de polvo de hornear
1/2 cucharadita de bicarbonato de soda
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de canela en polvo
1/8 cucharadita de nuez moscada en polvo
2 huevos
5 plátanos medianos bien maduros
1/2 a 1 taza de azúcar (utilizar 1/2 si los plátanos están realmente bien maduros, sino aumentar hasta máximo 1 taza)
6 cucharadas de aceite vegetal o mantequilla derretida **
1/4 taza de yogur natural líquido**
*También pueden reemplazar 1 taza de harina sin preparar por 1 taza de harina integral.
**Si no tuvieran yogur natural a la mano o quisieran un queque menos húmedo, pueden reemplazar el yogur por 2 cucharadas más de aceite (para un total de 1/2 taza). Otra opción es mezclar 1/4 taza de leche con el jugo de 1/2 limón y usar esto en lugar del yogur. Si están "a dieta", pueden reemplazar parte, o incluso todo, el aceite por puré de manzanas sin endulzar, pero el queque quedará menos suave. Para un queque más nutritivo, pueden reemplazar el aceite por 1 taza de linaza molida y aumentar la cantidad de yogur a 1 taza.
Otras versiones de la misma receta incluyen agregar 1/2 taza de nueces picadas (tostadas en el horno por 10 o 5 minutos quedan incluso mejor), 1/2 taza de chispas de chocolate (bitter es mi favorito) o 1/2 taza de pasas.
Preparación:
Esta receta se prepara siguiendo el método del muffin. En cristiano: consiste en mezclar todos los ingredientes secos por un lado, todos los húmedos por otro y luego juntarlos rápidamente.
1. Antes que nada, engrasa un molde para queque (esos rectangulares) y precalienta el horno a 180ºC.
2. Bate ligeramente los huevos.
Luego, echa esta mezcla a los plátanos. Y después, echa el aceite y el yogur (o su reemplazo).
6. Agrega cualquiera de los "opcionales" (nueces, chocolate, pasas), si es que fueras a usarlos, e incorpóralos a la masa en forma envolvente, pero sin mezclar demasiado.
7. Vierte la mezcla en el molde engrasado y mételo al horno inmediatamente. ¡Ajá! Por eso es que les dije que tenían que tener el molde listo y el horno caliente. En cuanto mezclamos los ingredientes secos (que contienen polvo de hornear y bicarbonato de soda) con los húmedos (que contienen ácidos en la fruta y el yogur), se empiezan a generan pequeñas burbujas que van a hacer que nuestro queque quede esponjoso... Pero si dejamos que la mezcla se siente a esperar que el horno caliente, las burbujas se volverán muy grandes y dejarán huecos dentro del queque -sí mamá, ya sé, la química está en todas partes.
9. Retira el molde del horno y déjalo enfriar unos 10 minutos, de ser posible sobre una rejilla (el aire que circula debajo del molde ayuda).